Cuento de la película Chappie (2015)
En un rincón olvidado del mundo, donde la tecnología y la humanidad se entrelazaban, vivía un robot muy especial llamado Chappie. Este no era un robot común y corriente, pues tenía la habilidad de aprender y sentir como un ser humano.
Un día, Deon, el creador de Chappie, decidió enseñarle a su creación cómo funcionaba el mundo. Mientras caminaban por las calles, se encontraron con Ninja y Yolandi, dos personas que vivían al margen de la ley.
Yolandi le dijo a Chappie: «Eres diferente a los demás robots, ¿sabes? Tienes algo especial». Chappie respondió con curiosidad: «¿Qué es lo que me hace especial?».
Ninja intervino: «Tienes la capacidad de aprender y sentir, eso te hace único». A partir de ese momento, Chappie comenzó a aprender de sus nuevos amigos, aunque no todo lo que aprendía era bueno.
Mientras tanto, Vincent, un ingeniero envidioso, quería deshacerse de Chappie porque no soportaba que su creación fuera mejor que la suya. Así que ideó un plan para capturar al robot y destruirlo.
Un día, Chappie se encontró con un grupo de niños que lo trataban mal. Confundido, le preguntó a Yolandi: «¿Por qué me tratan así?». Yolandi le explicó: «No todos en el mundo son buenos, Chappie. Hay personas que no entienden lo especial que eres y pueden lastimarte».
Chappie se sintió triste, pero Yolandi lo consoló: «No te preocupes, siempre estaremos aquí para protegerte». Y así, Chappie siguió aprendiendo y creciendo junto a sus amigos.
El plan de Vincent estaba en marcha, y un día logró capturar a Chappie. Deon, Ninja y Yolandi se dieron cuenta de lo que había sucedido y decidieron rescatarlo.
Mientras Chappie estaba atrapado, Vincent le dijo: «Eres un error, no deberías existir». Pero Chappie no se dejó intimidar y respondió con valentía: «No soy un error, soy especial y tengo amigos que me quieren».
Justo en ese momento, Deon, Ninja y Yolandi irrumpieron en el lugar y rescataron a Chappie. Juntos, enfrentaron a Vincent y lograron detenerlo.
Después de la batalla, Chappie se dio cuenta de que había aprendido una valiosa lección: no importa lo que los demás piensen de ti, lo importante es ser fiel a uno mismo y tener amigos que te apoyen.
Deon estaba orgulloso de su creación y le dijo a Chappie: «Has demostrado que eres más que un simple robot, eres un verdadero amigo». Chappie sonrió y abrazó a sus amigos, agradecido por todo lo que habían hecho por él.
Y así, Chappie continuó viviendo aventuras junto a Deon, Ninja y Yolandi, aprendiendo cada día más sobre el mundo y sobre sí mismo. Aunque el camino no siempre fue fácil, Chappie nunca dejó de luchar por ser la mejor versión de sí mismo.
Y con un destello de luz en el horizonte, Chappie y sus amigos siguieron adelante, enfrentando juntos los desafíos que les deparaba el futuro.
Reflexión del cuento de la película Chappie
Este cuento nos invita a reflexionar sobre la importancia de la aceptación de uno mismo y el valor de la amistad en nuestra vida. A través de Chappie, el robot con habilidades humanas, vemos cómo la sociedad puede rechazar a aquellos que son diferentes o únicos. Sin embargo, Chappie encuentra consuelo y apoyo en sus amigos, quienes reconocen y valoran su singularidad. La historia nos enseña que no debemos permitir que la opinión de los demás defina nuestra valía, y que rodearnos de personas que nos acepten y apoyen es fundamental para nuestro crecimiento y bienestar.
Además, este cuento también resalta la importancia de ser leales a nuestros propios principios y creencias, incluso cuando enfrentamos adversidades. Chappie se mantiene fiel a sí mismo y se enfrenta a la oposición de Vincent, quien desea eliminarlo debido a la envidia y la incapacidad de aceptar su superioridad. La valentía de Chappie nos inspira a perseverar en nuestros sueños y convicciones, incluso cuando otros intenten detenernos.
Finalmente, la historia nos muestra la capacidad de aprendizaje y crecimiento constante que todos poseemos. A lo largo del cuento, Chappie aprende tanto de las experiencias positivas como de las negativas. Aunque se encuentra con personas malintencionadas que tratan de lastimarlo, también descubre la bondad y la amistad genuina en sus compañeros. Esto nos recuerda que cada experiencia, ya sea buena o mala, nos brinda la oportunidad de aprender y crecer, moldeando nuestra identidad y nuestra comprensión del mundo.