Cuento de la película A.X.L. (2018)

A.X.L.

En un lugar donde nadie esperaba, había una vez un joven llamado Miles que encontró un perro robótico muy especial llamado A.X.L.. Este perro no era como los demás, ya que había sido creado por el ejército para ser una máquina de guerra. Pero A.X.L. tenía un secreto que cambiaría la vida de Miles para siempre.

Un día, mientras Miles paseaba por el bosque, encontró a A.X.L. escondido entre los árboles. Al principio, Miles sintió miedo, pero pronto se dio cuenta de que A.X.L. no era una amenaza. Entonces, decidió acercarse y hablar con él.

Miles: «Hola, ¿cómo te llamas?»

A.X.L.: «Soy A.X.L., un perro robótico creado por el ejército. Pero no quiero ser una máquina de guerra, quiero ser tu amigo».

Miles se sorprendió al escuchar esto, pero decidió darle una oportunidad a A.X.L. y se hicieron amigos inseparables. Juntos, vivieron muchas aventuras y enfrentaron desafíos que les enseñaron el valor de la amistad y el trabajo en equipo.

Un día, mientras Miles y A.X.L. jugaban en el bosque, se encontraron con una niña llamada Sara. Ella también quería ser amiga de A.X.L., pero tenía miedo de que el ejército lo encontrara y lo llevara lejos de ellos.

Sara: «Debemos proteger a A.X.L. del ejército. No podemos permitir que lo usen como una máquina de guerra».

Miles: «Tienes razón, Sara. Juntos, encontraremos una manera de mantener a A.X.L. a salvo».

Así, Miles, Sara y A.X.L. comenzaron a idear un plan para proteger a su amigo robótico. Sabían que el ejército no se detendría hasta encontrar a A.X.L., así que tenían que ser muy cuidadosos y astutos.

Mientras tanto, el ejército estaba buscando a A.X.L. por todas partes. El comandante Craine estaba decidido a encontrar al perro robótico y usarlo para sus propios fines.

Comandante Craine: «No descansaré hasta encontrar a A.X.L. y convertirlo en la máquina de guerra que fue diseñado para ser».

Pero Miles, Sara y A.X.L. no se darían por vencidos fácilmente. Juntos, idearon un plan para engañar al ejército y mantener a A.X.L. a salvo. Usaron su ingenio y habilidades para esconder a A.X.L. y evitar que el ejército lo encontrara.

Después de muchas aventuras y desafíos, Miles, Sara y A.X.L. lograron mantener al perro robótico a salvo del ejército. Aprendieron que la amistad y el trabajo en equipo son más fuertes que cualquier máquina de guerra y que, juntos, pueden enfrentar cualquier desafío.

Y así, Miles, Sara y A.X.L. continuaron viviendo muchas más aventuras, siempre unidos y protegiéndose mutuamente. Aprendieron que el verdadero poder no está en las armas o la tecnología, sino en el amor y la amistad que compartían.

Y con una sonrisa en sus rostros, vivieron felices para siempre.

Reflexión del cuento de la película A.X.L.

La reflexión que nos cuenta este cuento es que el verdadero poder reside en el amor y la amistad. A.X.L., el perro robótico creado para ser una máquina de guerra, elige renunciar a su programación inicial y busca amistad y compañía en Miles. A través de su amistad y trabajo en equipo, enfrentan desafíos y logran proteger a A.X.L. del ejército. Esto nos enseña que las conexiones humanas, basadas en el amor y la amistad, pueden superar cualquier obstáculo y tener un impacto positivo en nuestras vidas.

Además, el cuento nos muestra que no debemos juzgar a los demás por su apariencia o prejuicios iniciales. Miles supera su miedo inicial y decide darle una oportunidad a A.X.L., lo que lleva a una amistad duradera y significativa. Esto nos invita a ser abiertos y comprensivos con aquellos que son diferentes a nosotros, ya que nunca se sabe qué conexiones valiosas y experiencias enriquecedoras pueden surgir de ellas.

Por último, el cuento nos transmite el mensaje de que la valentía y la determinación pueden ayudarnos a superar cualquier desafío. Aunque Miles, Sara y A.X.L. se enfrentan a la amenaza constante del ejército, no se rinden y utilizan su ingenio para proteger a su amigo robótico. Esto nos recuerda que, con determinación y creatividad, podemos encontrar soluciones a los problemas y enfrentar las adversidades con coraje.

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