Cuento de la película La Historia sin Fin (1984)
En un lugar donde los sueños cobran vida, existía un mundo mágico llamado Fantasia. Este mundo estaba en peligro, y solo un niño llamado Bastián podía salvarlo.
Un día, Bastián encontró un libro misterioso en una tienda de antigüedades. El libro se llamaba «La historia interminable«. Al comenzar a leerlo, Bastián se dio cuenta de que estaba siendo transportado al mundo de Fantasia.
En Fantasia, la Emperatriz Infantil estaba gravemente enferma, y su reino estaba siendo devorado por una fuerza oscura llamada la Nada. Para salvar a la Emperatriz y a Fantasia, Bastián debía encontrar a un valiente guerrero llamado Atreyu.
Atreyu era un joven cazador de la tribu de los greenskins. Él y su fiel compañero, un dragón blanco de la suerte llamado Fújur, emprendieron la misión de encontrar una cura para la Emperatriz Infantil. Durante su viaje, Atreyu y Fújur conocieron a muchos personajes interesantes, como el gigante de piedra Pymonte, la anciana Urgl y su esposo Engywook, y un murciélago parlante llamado Gluckuk.
En un momento de su aventura, Atreyu y Fújur llegaron a un lugar llamado El Pantano de la Tristeza. Allí, Atreyu perdió a su amado caballo Artax en las aguas tristes y pantanosas. A pesar de su dolor, Atreyu continuó su búsqueda, decidido a salvar a la Emperatriz Infantil y a Fantasia.
Mientras tanto, Bastián seguía leyendo el libro y descubrió que él también era parte de la historia. Cada vez que Bastián leía sobre las aventuras de Atreyu, se sentía más conectado con el valiente guerrero y su misión.
Atreyu finalmente llegó a la Torre de Marfil, donde vivía la Emperatriz Infantil. Allí, se encontró con un ser llamado Gmork, un lobo feroz que servía a la Nada. Gmork reveló que la única forma de salvar a la Emperatriz y a Fantasia era que un humano le diera un nuevo nombre a la Emperatriz.
Bastián, al darse cuenta de que él era ese humano, gritó el nuevo nombre de la Emperatriz Infantil: «Moon Child«. Al hacerlo, Bastián salvó a la Emperatriz y a Fantasia de la Nada. La Emperatriz Infantil le agradeció a Bastián y le otorgó un deseo.
Bastián deseó que Fantasia fuera restaurada a su antigua gloria, y así fue. Todos los personajes y lugares que habían sido destruidos por la Nada volvieron a la vida, y la Emperatriz Infantil volvió a gobernar en paz y armonía.
Después de cumplir su deseo, Bastián regresó al mundo real, llevando consigo el libro mágico y las lecciones que había aprendido en Fantasia. A partir de ese día, Bastián se convirtió en un niño más valiente y seguro de sí mismo, sabiendo que siempre tendría un lugar especial en su corazón para el mundo mágico de Fantasia.
Y así, con un suspiro de felicidad y un corazón lleno de aventuras, Bastián cerró el libro y volvió a su vida, sabiendo que siempre podría visitar Fantasia cuando lo deseara.
Reflexión del cuento de la película La Historia sin Fin
Este cuento nos invita a reflexionar sobre la importancia de la imaginación, los sueños y la valentía. A través de la historia de Bastián y su viaje a Fantasia, se nos muestra cómo nuestros propios sueños y fantasías pueden tener un impacto real en nuestras vidas y en el mundo que nos rodea.
El cuento nos enseña que nuestra imaginación y la capacidad de soñar nos permiten escapar de la realidad y explorar nuevos horizontes. Además, nos muestra que la valentía y la determinación son fundamentales para enfrentar los desafíos y superar los obstáculos que encontramos en nuestro camino.
También nos muestra la importancia de la empatía y la conexión con los demás. Bastián se siente conectado con Atreyu y su misión, lo que le permite comprender su papel en la historia y tomar decisiones valientes para salvar a Fantasia.