Cuento de la película Harry Potter y el Prisionero de Azkaban (2004)
En una noche oscura y tormentosa, Harry Potter se encontraba en su habitación, pensando en lo que le esperaba en su tercer año en Hogwarts. De repente, escuchó un ruido extraño que lo llenó de intriga y curiosidad. ¿Qué sería ese misterioso sonido?
Al llegar a Hogwarts, Harry se reunió con sus mejores amigos, Hermione Granger y Ron Weasley. Juntos, comenzaron a investigar el enigma del ruido que Harry había escuchado. Mientras tanto, en el mundo mágico, todos hablaban de un peligroso prisionero que había escapado de Azkaban, llamado Sirius Black.
Un día, en el Gran Comedor, Harry le preguntó a Ron:
– Oye, Ron, ¿has oído hablar de Sirius Black?
– Sí, Harry, dicen que es muy peligroso y que está buscándote – respondió Ron con preocupación.
Hermione intervino en la conversación:
– No podemos dejar que el miedo nos detenga. Tenemos que descubrir qué está pasando y proteger a Harry.
Los tres amigos decidieron investigar más sobre Sirius Black y el extraño ruido que Harry había escuchado. Durante sus aventuras, conocieron a un nuevo profesor llamado Remus Lupin, quien les enseñó valiosas lecciones sobre la amistad y el coraje.
Mientras tanto, en los terrenos de Hogwarts, un enorme perro negro aparecía y desaparecía misteriosamente. Harry, Ron y Hermione sospechaban que este perro tenía algo que ver con Sirius Black y el ruido que Harry había escuchado.
Un día, los tres amigos siguieron al perro negro hasta una casa abandonada llamada La Madriguera. Allí, descubrieron que el perro negro era en realidad Sirius Black, quien se había transformado en un animago. Pero, para su sorpresa, también descubrieron que Sirius no era el enemigo que todos creían.
Sirius les contó su historia y les reveló que él era el padrino de Harry. Además, les explicó que el verdadero traidor era Peter Pettigrew, quien había estado escondido todo el tiempo como la rata de Ron, llamada Scabbers.
Juntos, Harry, Ron, Hermione y Sirius enfrentaron a Peter Pettigrew y lograron capturarlo. Sin embargo, antes de que pudieran entregarlo a las autoridades, Peter escapó y desapareció en la oscuridad.
A pesar de que no pudieron atrapar a Peter Pettigrew, los amigos aprendieron valiosas lecciones sobre la amistad, la lealtad y la importancia de no juzgar a las personas por su apariencia. Al final, Harry se despidió de Sirius, prometiendo mantenerse en contacto y protegerse mutuamente.
Y así, con el misterio del ruido resuelto y la verdad sobre Sirius Black revelada, Harry, Ron y Hermione regresaron a Hogwarts para continuar sus estudios y vivir nuevas aventuras. Y como dice el viejo refrán mágico: «Donde hay magia, siempre habrá un cuento por contar».
Reflexión del cuento de la película Harry Potter y el Prisionero de Azkaban
Este cuento nos habla sobre la importancia de la amistad, la lealtad y la confianza. Harry, Ron y Hermione son amigos inseparables que trabajan juntos para descubrir la verdad sobre el misterioso ruido que Harry escuchó y para protegerse mutuamente de los peligros que enfrentan. En el camino, aprenden lecciones valiosas sobre la importancia de no juzgar a las personas por su apariencia y sobre la verdadera naturaleza de la lealtad.
El cuento también destaca la importancia de la perseverancia y la determinación en la búsqueda de la verdad y la resolución de los problemas. Los tres amigos trabajan juntos para investigar el misterio y no se rinden hasta que descubren la verdad y resuelven el problema.