Cuento de la película Amor de Gata (2020)

En una noche estrellada, donde la luna iluminaba el pequeño pueblo, comenzó una historia mágica y emocionante. Miyo Sasaki, una niña alegre y enérgica, estaba enamorada de su compañero de clase Kento Hinode. Pero había un secreto que nadie conocía: Miyo tenía la habilidad de transformarse en un gato llamado Taro gracias a una misteriosa máscara que encontró en un callejón.

Un día, mientras Miyo y su amiga Yoriko Fukase caminaban juntas, Miyo le contó a Yoriko sobre su amor por Kento. Yoriko le aconsejó que se lo confesara, pero Miyo tenía miedo de ser rechazada.

Miyo: ¿Y si no le gusto? No quiero perder nuestra amistad.

Yoriko: Si no lo intentas, nunca lo sabrás. Además, eres una persona maravillosa, estoy segura de que le gustarás.

Mientras tanto, en la casa de Kento, él y su hermana pequeña Kaoru estaban hablando sobre sus sueños y metas.

Kaoru: ¿Cuál es tu sueño, hermano?

Kento: Quiero ser un ceramista, como nuestro abuelo. Me encanta crear cosas con mis manos y darles vida.

Esa noche, Miyo se transformó en Taro y fue a visitar a Kento. Al verlo trabajar en su cerámica, se sintió aún más enamorada de él. Decidió que, como Taro, podría acercarse a Kento y conocerlo mejor sin miedo al rechazo.

Los días pasaron y Miyo, en su forma de gato, se volvió muy cercana a Kento. Pero un día, mientras estaba en su forma humana, Miyo se encontró con un gato llamado Kinako, que resultó ser una mujer llamada Abeno atrapada en el cuerpo de un gato.

Abeno: Te advierto, si sigues usando la máscara, te quedarás atrapada en el cuerpo de un gato para siempre.

Miyo: Pero es la única forma en que puedo estar cerca de Kento sin miedo.

Abeno: Debes enfrentar tus miedos y ser tú misma. No puedes vivir una vida feliz si te escondes detrás de una máscara.

Miyo se sintió preocupada, pero decidió seguir usando la máscara para estar cerca de Kento. Sin embargo, un día, mientras estaba en su forma de gato, Miyo fue atropellada por un automóvil y quedó gravemente herida. Kento la encontró y la llevó a su casa para cuidarla.

Kento: Taro, no sé qué haría si te perdiera. Eres mi mejor amigo.

Al escuchar esto, Miyo se dio cuenta de que no podía seguir escondiéndose detrás de la máscara. Decidió confesarle sus sentimientos a Kento en su forma humana.

Miyo: Kento, tengo algo que decirte. Yo soy Taro, y estoy enamorada de ti.

Kento: ¿Qué? ¿Cómo es posible?

Miyo: Encontré una máscara mágica que me permitía transformarme en un gato. Pero ahora sé que no puedo seguir escondiéndome. Quiero ser yo misma contigo.

Kento, sorprendido pero conmovido, aceptó los sentimientos de Miyo. Juntos, enfrentaron sus miedos y aprendieron a amarse y apoyarse mutuamente.

Y así, con el amor y la amistad floreciendo en sus corazones, Miyo y Kento comenzaron una nueva vida juntos, dejando atrás las máscaras y enfrentando el mundo como ellos mismos. Y como en todos los cuentos llenos de magia y amor, vivieron felices para siempre, y colorín colorado este cuento se ha acabado.