Cuento de la película Nomadland (2020)

Había una vez, en un lugar lleno de misterio y aventura, una mujer llamada Fern que vivía en su furgoneta. Ella había perdido todo lo que tenía, pero encontró una nueva vida en la carretera, junto a otros nómadas que también buscaban un nuevo comienzo.

Un día, Fern conoció a Swankie, una mujer mayor que le enseñó cómo sobrevivir en la vida nómada. Mientras conversaban, Swankie le dijo:

– Fern, la vida en la carretera puede ser dura, pero también es hermosa. Siempre hay algo nuevo que aprender y gente interesante que conocer.

Más tarde, Fern se encontró con Bob Wells, un hombre sabio que había creado una comunidad de nómadas llamada RTR (Rubber Tramp Rendezvous). Bob le enseñó a Fern la importancia de ayudarse mutuamente y compartir conocimientos.

Un día, mientras Fern trabajaba en un almacén, conoció a Dave, un hombre amable que también vivía en su vehículo. Dave le preguntó a Fern:

– ¿Te gustaría unirte a nosotros en el RTR? Es un lugar donde los nómadas se reúnen para compartir experiencias y aprender unos de otros.

Fern aceptó la invitación y juntos se dirigieron al RTR. Allí, Fern conoció a muchos otros nómadas, como Linda May y Derek, quienes compartieron sus historias y le enseñaron nuevas habilidades.

A medida que Fern se adentraba en la vida nómada, comenzó a sentirse más conectada con la naturaleza y con las personas que la rodeaban. Sin embargo, también extrañaba a su esposo, que había fallecido, y a su antigua vida en la ciudad de Empire.

Un día, Dave le dijo a Fern que había decidido regresar a su hogar para estar con su familia. Le preguntó si quería acompañarlo, pero Fern no estaba segura de qué hacer.

– Dave, me encantaría ir contigo, pero siento que todavía tengo mucho que aprender y experimentar en la carretera.

Dave comprendió y le dijo a Fern que siempre serían amigos, sin importar dónde estuvieran.

Con el tiempo, Fern siguió viajando y conociendo a más nómadas. Aprendió a apreciar la libertad y la belleza de la vida en la carretera, pero también entendió que cada persona tenía sus propias razones para elegir ese estilo de vida.

Finalmente, Fern decidió visitar su antiguo hogar en Empire para enfrentar su pasado y encontrar la paz. Al llegar, se dio cuenta de que la ciudad ya no existía, pero en su lugar había un hermoso paisaje natural.

Mientras Fern contemplaba el horizonte, se dio cuenta de que había encontrado un nuevo hogar en la carretera y en la comunidad de nómadas. Aunque su vida había cambiado, había aprendido a adaptarse y encontrar la felicidad en su nueva realidad.

Y así, con una sonrisa en su rostro y el viento en su cabello, Fern continuó su viaje, llevando consigo las lecciones y amistades que había hecho en el camino. Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.