Cuento de la película Spider-Man: Sin Camino a Casa (2021)

En una noche oscura y tormentosa, algo increíble estaba a punto de suceder. Peter Parker, también conocido como Spider-Man, se encontraba en una situación complicada. Su identidad había sido revelada al mundo, y ahora todos sabían que él era el hombre detrás de la máscara.

Peter decidió pedir ayuda a su amigo y mentor, el Doctor Strange. Juntos, idearon un plan para hacer que el mundo olvidara que Peter Parker era Spider-Man. Pero algo salió mal, y en lugar de solucionar el problema, abrieron las puertas a un multiverso lleno de sorpresas.

De repente, aparecieron otros dos Spider-Man de universos diferentes: Peter Parker de otro mundo y Miles Morales. Los tres héroes arácnidos se encontraron cara a cara, asombrados por la situación.

Peter 1 (nuestro Peter) dijo: «No puedo creer que haya más Spider-Man como yo en otros universos».

Peter 2 (el otro Peter) respondió: «Sí, es sorprendente. Pero debemos unir fuerzas para enfrentar a los villanos que también han llegado de otros mundos».

Miles agregó: «Estoy de acuerdo. Juntos, somos más fuertes».

Mientras tanto, los villanos Doctor Octopus, Electro y El Lagarto se unieron para causar caos en la ciudad. Los tres Spider-Man decidieron trabajar juntos para detenerlos y proteger a los ciudadanos.

Durante una intensa batalla, Peter 1 le preguntó a Peter 2: «¿Cómo lograste vencer a Doctor Octopus en tu mundo?»

Peter 2 respondió: «Tuve que encontrar una manera de desactivar sus brazos mecánicos. Tal vez podamos hacer lo mismo aquí».

Miles sugirió: «Podría usar mis poderes eléctricos para aturdirlo y darles tiempo para desactivar sus brazos».

Los tres Spider-Man pusieron en marcha su plan y, trabajando juntos, lograron derrotar a los villanos. Pero aún quedaba un desafío mayor: encontrar la manera de regresar a cada Spider-Man y villano a su propio universo.

Doctor Strange apareció y les dijo: «He encontrado una solución, pero necesitaré la ayuda de todos ustedes. Deben mantener a los villanos bajo control mientras cierro los portales».

Los tres Spider-Man aceptaron la misión y, con la ayuda de Doctor Strange, lograron enviar a cada villano y a los otros dos Spider-Man de vuelta a sus respectivos universos.

Finalmente, Peter 1 y Doctor Strange encontraron una manera de hacer que el mundo olvidara la identidad de Spider-Man, pero a un gran costo: todos los seres queridos de Peter también olvidarían quién era él.

Con el corazón lleno de tristeza pero también de esperanza, Peter Parker aceptó el sacrificio y continuó protegiendo a la ciudad como Spider-Man, sabiendo que siempre tendría amigos en otros universos dispuestos a ayudarlo cuando fuera necesario.

Y así, en un abrir y cerrar de ojos, la aventura llegó a su fin, dejando a todos con la certeza de que, sin importar los desafíos que enfrenten, siempre habrá un Spider-Man listo para proteger a los inocentes.

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.